Se sabía que sería un partido complicado, pero los primeros minutos de las cerveceras fueron de manual. El Barça tenía el dominio del balón, pero las jugadoras de Ana Barbancho lograron que las azulgranas no llegaran con facilidad a la portería de Maria Torres.
Fue en el minuto 20 cuando Laia Cabetas consiguió que el balón entrara. A pesar del gol encajado, las cerveceras no bajaron los brazos. La actuación defensiva de la Damm fue buena. Sin embargo, cuando las rojillas lograban recuperar el balón, la precipitación y los nervios provocados por la alta presión de las culés hacían que lo perdieran rápidamente.
Quien no arriesga, no gana
El 1-0 se mantuvo hasta iniciada la segunda parte, cuando el conjunto cervecero optó por jugar con el balón e intentar igualar el marcador. La arriesgada decisión hizo que las culés dejaran de encontrarse con el bloque bajo de la primera mitad.
Las cerveceras, con el cansancio acumulado, no lograron defender con todos los efectivos una acción que acabó en el segundo gol azulgrana. Este tanto dejó tocada a la Damm, pero no hundida.
Un penalti a favor del conjunto local disipó las posibilidades de vencer a las líderes. Minutos más tarde, Nora estuvo a punto de marcar el gol del honor. Finalmente, en la última jugada del partido, Lidia Gibert anotó para sentenciar el encuentro.
